Se medía el Atleti a un equipo inferior sobre el papel con la intención de golear y buscar acercarse al Benfica que venció al Astana 5-0. Los de Óscar Hernández jugaron un buen partido aunque ‘sólo’ pudieron hacer cuatro a los turcos. La primera plaza es posible, aunque se deberá golear en Lisboa.
Que el Juvenil del Atleti y el del Galatasaray están a distinto nivel estaba claro. Los números corroboraban esta idea. El Atleti partía con seis puntos más y con una diferencia de goles de +16 frente a los -11 de los turcos. Así, los dos equipos empezaron con las ideas muy claras, pero los visitantes con el acierto que le faltó a los rojiblancos. El Atleti buscó una verticalidad que se volvía horizontal con un centro del campo anulado por el rival. El Galatasaray, por su parte, tocó con mucho criterio y seriedad el balón. Se acercó con rapidez al área de su rival, que en los primeros compases los locales ya se habían llevado dos sustos por sendos despistes defensivos.
Pese a que los turcos no permitían acercarse a su área pequeña y se empeñaban en dominar el partido, el Atleti siguió intentándolo y en el minuto 31 llegó el premio cuando Moyá disparó desde fuera del área y el balón entró por bajo pegado al poste. Así se llegó al descanso.
Tras el intermedio el partido cambió completamente. En cuatro minutos el Atleti había puesto el 3-0 el marcador con los goles de Rubén Fernández y, de nuevo, Moyá. La segunda parte transcurrió como se esperaba que fuera todo el partido. Un Galatasaray cada vez más encerrado y un Atlético de Madrid que lo intentó una y otra vez ayudándose principalmente de las entradas por banda y del balón parado. Los turcos no encontraron ya la velocidad en sus contras y sí una defensa contraria muy acertada, apoyada en la presión adelantada de todo el equipo.
Cerró el 4-0 final Roberto Núñez en el 91, sumando un gol más como pichichi del torneo, el noveno, y como máximo anotador histórico de la competición, con 15 goles.
El Atlético se jugará la primera plaza del grupo y, por lo tanto, el pase directo a octavos, el próximo 8 de diciembre ante el Benfica. Deberán ganar por más de dos goles de diferencia, o por uno siempre y cuando marquen al menos 3. Las cuentas están claras. Falta ejecutarlas.