RCD Espanyol
Atlético de Madrid Féminas
CRÓNICA. En una semana marcada por la agonía y posterior felicidad vivida por todos los colchoneros, el Atleti Féminas demostró que también sabe sufrir. Las rojiblancas no necesitaron de penaltis para mantener vivo el sueño de la Champions, pero tuvieron que sudar la gota gorda para superar a un rocoso Espanyol. El conjunto catalán demostró que el empate contra el Barcelona como local no fue casualidad y el Atleti Féminas rozó el fiasco en un partido que nació extraño y se movió casi entre los fenómenos paranormales.
Y es que todos los ingredientes previos al partido invitaban a un desarrollo fuera de lo común. No es habitual en un encuentro importante dejar fuera de la convocatoria a tu segunda mayor goleadora (Esther) y a tu pivote de referencia (Nago). Tampoco es demasiado frecuente viajar con tu lateral izquierdo titular (Mapi León) y acabar jugando con la teórica suplente. Incluso se aleja de lo razonable cambiar a una jugadora por línea, pero como decimos hoy pintaba un día distinto.
Lo único que no cambió en un partido tan extraño fue el gol de sonia, que huele a pichichi
Así comenzó el partido, con el regreso de Meseguer como noticia más destacada. Y hasta eso salió mal, ya que la internacional se volvió a lesionar cuando apenas habían trascurrido 35 minutos de un partido que certifica su ‘annus horribilis’. Sin embargo, lo poco que se puede tildar de normal ya era por entonces cosa del pasado en la Ciudad Deportiva Dani Jarque. En el marcador lucía ya el gol de la pichichi, pues Sonia perforó la red rival como cada fin de semana.
Y hasta aquí la nómina de sucesos habituales, porque también el Espanyol tenía un gol en su cuenta después de una jugada aislada. Tan esporádica que el conjunto catalán superó a Lola Gallardo en su único remate, siendo la única vez que el equipo pisó el área rojiblanca en toda la primera mitad. Sin embargo, el gol de Aroa contrarrestó el dominio del Atleti Féminas aunque en la celebración acabase con una brecha por un mordisco de una compañera, que de paso perdió parte de un diente en el golpe.
El Atleti Féminas ganó un partido que se puso cuesta arriba y en el que nada fue ‘normal’
Ni siquiera el descanso devolvió el partido a unos cauces lógicos. El Féminas demostró el mismo nivel de dominio como de inoperancia ante la portería, ya que se pasó toda la segunda mitad lazando desde media distancia y marrando ocasiones que acabaron por encima de la portería o en los guantes de Norma. Con las delanteras rozando la más pura desesperación, el bloqueo impropio del equipo se deshizo ligeramente gracias al papel de las laterales. Bea y Kenti, que salió en la segunda mitad, movieron al equipo.
Como es lógico, el partido no podía terminar con un guión imaginable y el desenlace no pudo ser más rocambolesco. Centro-chut de Amanda, fusión entre error y resbalón de la portera del Espanyol y gol de Priscila. La delantera empujó el balón con tanta facilidad que sonó extraño en un partido tan complicado que casi por inercia acabó por terminar. Sin ser el mejor encuentro del Atleti Féminas, las rojiblancas volvieron a ganar y meten presión a las líderes. Ahora toca apelar a que los fenómenos paranormales se trasmitan a Athletic y Barcelona, porque que ambos equipos no suelen fallar.
Jugaron: Lola; Bea, Marta Carro (Kenti Robles, 63′), Rocío, Vane; Ángela Sosa, Meseguer (Mariela, 35′); Priscila, Amanda, Débora (Kuky, 80′); Sonia.
El árbitro amonestó a: Sonia (86′).
Fotografía: La Liga