CEDIDOS. Volvió a suceder, pero esta vez al Sevilla. Dos de los modus operandi con los que el Real Madrid detrozó los sueños de Champions League del Atlético en 2014 y 2015 (gol de Ramos en el descuento y gol definitivo en los últimos instantes). Los madridistas volvieron a rendir a altísimo nivel en una final europea donde superaron la adversidad doblegando in extremis a un Sevilla que compitió pero no supo conservar una ventaja que le hubiera dado su segunda Supercopa.
Vitolo igualó el golazo inicial de Asensio y el partido llegó al último cuarto con tablas. El Sevilla marcó el 1-2 de penalti, marcado por Konoplyanka. Sergio Ramos volvió a helar la sangre de sus rivales marcando de cabeza en el descuento de una final cuando pasaban tres minutos del tiempo reglamentario. El Real Madrid se creció en la prorroga y Carvajal marcó el definitivo 3-2 a unos minutos del final del tiempo extra.
Vietto tuvo una discretísima participación y fue sustituido por Konoplyanka (quien marcaría el gol de penalti). El ataque sevillista fue comandado por un formidable ‘Mudo’ Vázquez, que valga la paradoja, dará muchísimo de qué hablar esta temporada. Vietto no tuvo ninguna presencia en el ataque andaluz y estuvo inoperante y desconectado hasta ser sustituido.
Tampoco fue un buen partido para Kranevitter que vio como N’Zonzi e Iborra le ganaron la pugna por ser titulares en el primer once oficial de Sampaoli. El argentino salió tras el gol de penalti en el minuto 74 y estuvo muy blando (como toda la defensa sevillista) en el 3-2 definitivo del Real Madrid, permitiendo la internada y posterior disparo certero de Carvajal en los minutos finales. Al mediocentro le faltó contundencia defensiva.
Fotografía: Michael Steele/Getty Images